Es su primer cumpleaños! Por fin ha llegado el día, y aquí en mi estudio les damos un regalo lleno de color, una tarta especialmente hecha para ellos, para el bebé tan querido y por el que todo lo dan sus papás.
Es el día en que pueden mancharse, comer lo que quieran, ya con un año se les permite comer casi de todo, reír hasta el fin, y todo esto quedará reflejado en montones de fotografías.
Cuándo mi primer hijo cumplió un año, le hicimos una tarta con una vela encendida y en un descuido nuestro él tocó la velita con su dedo, ¡claro ! imaginaros que celebración, todo lleno de llantos y dolores. ¡ pobrecito! Por eso las velas aquí no se encienden, no se soplan, pero os aseguro que en este caso no les hace falta, ellos se llenan de ilusión con este tipo de sesiones.
¡contrata la tuya!