Días antes de su boda, los novios tienen muchas cosas que contarse, tanto de que hablar que a veces no les queda tiempo para pasear y hacerse esas confidencias tan necesarias.
Una sesión de fotos puede ser ese momento, aprovechar para hablar entre ellos, demostrarse su amor e intentar relajarse al aire libre.
Y cuando ven el resultado y su recuerdo para toda la vida ….. Es emocionante y realmente merece la pena.
Os presento a dos novios muy especiales, lo demás lo muestran las fotos, espero que os gusten tanto como a ellos y a mi.