Este bebé tan grande y amoroso se portó fenomenal, y aunque las fotos con un mes son más complicadas porque no duermen tanto, conseguimos que se relajara tanto que ¡ni su madre se lo podía creer !.
Veréis que es precioso, vamos que me he quedado súper feliz de haberle disfrutado unas horas.
Y .. por cierto gracias a la tía del bebé que les regaló la sesión de fotos. Es un regalo que nunca, nunca olvidarán.